¡Estos zapatos me aprietan!

¡¡¡¡¡Hola de nuevoooooooo!!! ¿Cómo va esa semana? La nuestra a tope de power.

He enchufado mi WIFI interno para escuchar bien a los sabios que me rodean y resulta que me he enterado de unos truquillos top secret para solucionar un problemilla que nos ha pasado a todos más de una vez: qué hacer si me aprientan los zapatos.

¿Cuántas veces nos hemos comprado unos zapatos que nos encantan, en la tienda nos quedan perfectos pero llega la hora de ponerlos y "¡vaya, estos zapatos me aprietan!". Está claro que son demasiado bonitos para dejarlos en el armario pero no os preocupéis, en esta vida todo tiene solución (bueno todo o casi todo). Así que amig@s, coged papel y lápiz y anotad estos super mega consejillos para ganar esta batalla a los zapatos.

Aquí van los 5 trucos de sabio para evitar que aprieten los zapatos:

Para evitar este problema, antes de nada es importante que cuando estemos comprando unos zapatos nos tomemos el tiempo de probarlos, de reprobarlos y de volver a reprobarlos. Prueba los dos pies y camina un poco. Una mínima molestia después de varias horas caminando será  un verdadero suplicio.

1. Compra los zapatos por la tarde. Parece una tontería pero por la tarde, dada la actividad diaria y la retención de líquidos, los pies están más hinchados así que aprovecha esta circunstancia ya que evitarás que cuando se te hinchen los pies los zapatos te hagan daño.

2. Elije bien el material. los zapatos de piel se adaptan mucho mejor al pie que los de material sintético porque son más flexibles.  Los zapatos de plástico no dejan transpirar el pie

3. Dales calor. Ponte los calcetines más gordos que tengas y luego cálcate los zapatos. Una vez que los tengas puestos dale con el secador en las zonas que quieras ensanchar y déjatelos puestos hasta que se vuelvan a enfriar.

4. El poder del congelador. Rellena de agua hasta la mitad un bolsita transparente de las de congelar en cada zapato. Colócala bien en la punta de los zapatos y mételos en el congelador. Una vez que el agua esté bien congelada retira las bolsas y notarás que se han ensanchado. Este funciona mejor en zapatos de piel que sintéticos ya que estos últimos al ser plático siempre tiende a volver a su sitio así que tendrás que repetir los pasos.

5. Utiliza alcohol. Necesitarás 1/2 vaso de agua; 1/2 vaso de alcohol etílico; un pulverizador; y, unas hojas de papel. No es ningún experimentos del Dr. Chiflado no, funciona. Mezcla el agua y el alcohol en el pulverizador y rocía el interior del zapato hasta que esté todo bien húmedo. Por último, haz bolas de papel, introdúcelas en el interior y déjalo así toda la noche. ¡Ojo! utiliza papel blanco porque si utilizas periódicos, revistas o hojas de colores lo más seguro es que te tiñan el zapato. Y eso no lo queremos...

Ya véis, tenemos bastantes opciones para tratar de evitar este problema. Ay, ay, ay pues si que son sabios estos sabios...

¡Nos leemos!